LEYENDAS

EL MÚSICO

Cuenta la leyenda que antes, en la comunidad de San Pablo Actipan había un grupo musical, este se dedicaba a cantar de pueblo en pueblo, una vez fueron a tocar en San Buena Aventura.

Ya de regreso venían felices, un poco pasados de copas, venían cantando y como no había transporte venían caminando sobre la carretera.

Entonces a lo lejos vieron que venía un burro, pero que traía a un cerdo en el lomo. Entonces ellos buscaron al dueño del burro, pero no lo encontraron, por lo tanto intentaron robar al cerdo.

Entonces el burro al ver que intentaban robarle al cerdo le habló a los músicos, y les pidió que no le robaran porque el cerdo lo quería para realizar una fiesta y que si lo dejaban ir los invitaba, les dio la dirección del lugar, ellos lo dejaron ir y justo el día que el burro les dijo que tendría la fiesta, los músicos estaban indecisos de ir o no, por miedo y curiosidad.

Al final se animaron a ir, ya estando en el lugar se sorprendieron al ver que si había una fiesta, y cuando llegaron los atendieron bien, se dieron cuenta de que el dueño de la casa era el burro con el cerdo en el lomo.

Transcrito por:

Elizabeth Rosas Flores

LA LLORONA

Se cuenta que hace muchos años, vivía una mujer muy hermosa, la cual tenía dos hijos pequeños; ella amaba mucho a su esposo, el cual era general de cierto ejército; sin embargo, por lo mismo de su trabajo no estaba mucho tiempo con ella, solo venía cuando alguno de sus hijos pequeños enfermaba, esto era muy doloroso para su mujer.

Así que ella decidió idear algo para mantener a su lado al esposo, lastimaba a sus pequeños hijos, y así cada vez que ellos enfermaban el general acudía a la casa. Pero la mujer no conforme con ello quería tener al esposo más y más tiempo con ella.

Así que tomó la decisión de ahogar a sus hijos en un río cercano, ya que esto provocaría que su esposo guardara luto por sus pequeñitos y estaría mucho tiempo con la mujer. La mujer después de ahogarlos, esa misma noche llegó a la casa un mensajero, le entregó una carta en la que le comunicaban que su esposo había fallecido en una batalla.

La mujer enloqueció de dolor y remordimiento, se había quedado completamente sola, asesinó a sus dos pequeñitos y el hombre que más amaba estaba también muerto.

Esa noche ella desapareció y desde entonces todas las noches se ve a una mujer pregonando con gritos desgarradores…… hay mis hijos…….

                                                                                  Transcrita por:

Andrea Vidal Romero